MODIFICAN imposición de ceniza para evitar contagios de Covid19



El miércoles de ceniza se acerca; sin embargo, por cuestiones de la pandemia de COVID esta ceremonia se llevará a cabo de manera diferente, para evitar riesgos de contagios en las iglesias.


Según las creencias católicas, el próximo 17 de febrero se debe llevar a cabo esta celebración, la cual también inicia la Cuaresma, que es donde los católicos se preparan para vivir los misterios de la muerte y resurrección de Jesucristo la Semana Santa.


A pesar que tuvieron las debidas atenciones, el aislamiento y medidas sanitarias, la Comisión Diocesana de la Pastoral de la Comunicación (CODIPAC) de la Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez, confirmó que se han presentado contagios de COVID-19 en el presbiterio, afortunadamente han sido pocos los casos y todos los sacerdotes se recuperaron satisfactoriamente, siguiendo los protocolos de atención.


“Hubo casos, se tuvieron las debidas atenciones, el aislamiento, todos se recuperaron, no se presentaron decesos. A todos los sacerdotes se les pidió que mantuvieran los cuidados preventivos y en las más de 70 parroquias se siguen los protocolos de seguridad en salud”, argumentaron.


Por otra parte, el arzobispo Fabio Martínez Castilla, comunicó que en el inicio de la cuaresma “la imposición de ceniza el miércoles 17 de febrero para evitar un posible contagio será únicamente esparcida como lluvia de la Misericordia de Dios sobre nuestras cabezas”.


Dijo que este es un tiempo propicio para un cambio de actitud desde el corazón, en la reconciliación permanente, de volver el corazón a los demás desde nuestra caridad, es tiempo de peregrinar hacia aquellos que necesitan todo de todos con una sincera revisión de nuestra vida, subrayó Martínez Castilla en un comunicado.


“La mirada conmovida de Cristo se detiene hoy sobre los hombres y pueblos que sufren tanta injusticia, pobreza, violencia y diferentes tipos de atropellos a su dignidad. La injusticia, fruto del mal no tiene raíces exclusivamente externas; tiene su origen en el corazón humano, donde se encuentra el germen de una misteriosa convivencia con el mal”.


La invitación es a mirar con compasión al pueblo; urge trabajar nuestros corazones, desde el corazón, librarse del impulso egoísta para actuar con justicia, salgamos de la autosuficiencia, del estado de cerrazón, del egoísmo que es origen de nuestra injusticia y nos liberemos para el bien de todos, destacó.