Susana Solís Esquinca/SSI

 El video del hermano del presidente recibiendo dinero caló tan hondo que los dichos de Lozoya ya no alcanzaron para mantener la atención de la opinión pública, era entonces urgente encontrar otro tema y se encontró: una encuesta para consultar a los mexicanos si quieren que se enjuicie a los expresidentes.

Esta estrategia ya fue mejor planificada porque tuvieron que entrarle los legisladores para hacer crecer otra cortina de humo que no prosperará pero que mantendrá la discusión pública entretenida.

Los medios de comunicación son arrastrados a estas cajas chinas para dejar de hablar que la economía se desplomó más de 18% y cuya recuperación podría llevar una década, más de un sexenio perdido, para dejar de hablar que el Covid-19 ha cobrado la vida de más de 60 mil mexicanos y por ello ocupamos el tercer lugar en el mundo en número de fallecimientos por la pandemia y para ya no decir que la corrupción es endémica y es parte del ADN de todos los partidos.

La gráfica presentada por el diario El economista sobre la economía mexicana es letal. Ahora resulta que los neoliberales, conservadores y corruptos del pasado fueron más eficientes para hacer crecer el país. La clase media se achica, el número de pobres se ensancha y ¿los ricos?…esos de la mafia del poder…bien, gozan de cabal salud, obtienen contratos por adjudicación directa y viajan con el mandamás.