Chiapas, el estado que menor número de pruebas Covid-19 aplica




Aunque Chiapas es uno de los estados en el país que presenta menos contagios y defunciones por Covid-19, es también la entidad que menos pruebas de detección del virus aplica a nivel nacional.


De acuerdo con datos del Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica, con corte al 7 de febrero pasado, Chiapas aplicaba 948 pruebas de detección del virus por cada 100,000 habitantes, la tasa más baja del país. Al iniciar el 2021, Chiapas y Campeche eran las dos únicas entidades que estaban en color verde, de riesgo mínimo por Covid-19.


Sin embargo, a partir del 18 de enero, la Secretaría de Salud federal colocó a Chiapas en color amarillo del semáforo epidemiológico, mientras que Campeche regresó a color amarillo el primero de febrero.


No obstante, el número de pruebas aplicadas entre ambas entidades varía de manera importante ya que, hasta el 7 de febrero pasado, en Campeche se aplicaban 2,773 pruebas por cada 100,000 habitantes; casi el triple de las de Chiapas a la misma fecha de corte (948).


Defunciones

Las autoridades chiapanecas han registrado un menor número de decesos por Covid-19 respecto de los datos reportados a nivel federal.


Al 8 de febrero, el gobierno de Chiapas contabilizó 694 fallecimientos por el coronavirus, mientras que la Secretaría de Salud federal registró, a la misma fecha de corte, 1,379 decesos, es decir, 98.7% más.


El secretario de Salud de Chiapas, José Manuel Cruz Castellanos, dijo en comparecencia en el Congreso local el 16 de diciembre pasado que en defunciones hay “un 20% de subregistro, le vamos a llamar así, por nuestra dispersión poblacional, no logramos concentrar todas las actas de defunción en un sólo momento”.


Y lo aqueja la pobreza, pero reporta mínimo contagio de Covid

Hay una incongruencia que genera dudas entre los habitantes de Chiapas. Se preguntan cómo el estado, con tanta pobreza (ocupa el lugar número uno en el último ranking publicado sobre pobreza del Coneval, en el año 2018), es también el de menor cantidad de contagios y muertes por Covid-19 en el país, si justamente para abolir esa pobreza, la población no ha parado de salir a las calles para generar ingresos.


“Hay más muertos (cuyas condolencias se publican) en Facebook que en las estadísticas del gobierno del estado”, apunta el oficial de políticas económicas del Grupo Principal de las Naciones Unidas para la Niñez y la Juventud, Saúl Zenteno Bueno, entrevistado por El Economista.


Fue hasta el 19 de enero cuando la Secretaría de Salud estatal decretó el regreso al color amarillo, pero detrás de esa decisión se encuentran reclamos de trabajadores médicos y de la propia población, que acusan al gobierno local de falta de transparencia en los datos.


Chiapas y Campeche han sido los únicos estados que han pasado a semáforo verde en el último trimestre, justo cuando las cifras de contagios nacionales han llegado a niveles récord debido a que se cruzaron las celebraciones de fin de año.


Hasta la segunda semana de febrero, son las únicas dos entidades en color amarillo; mientras 17 más están en naranja y 13 en rojo.


Al corte del 8 de febrero, Chiapas era el estado con menos contagios acumulados en el país, con 9,630.


“Lo que agrava la situación en Chiapas es que no hay manera de verificar los datos oficiales ni de llevar un registro independiente. Como no hay manera de revisar, lo único que tenemos son los datos oficiales y en los datos oficiales de Chiapas, particularmente, hemos podido ver que existen inconsistencias durante toda la pandemia, porque han existido correcciones (a las cifras) y llegan a distorsionar indicadores, pero también puede suceder, como lo han indicado médicos de la UNAM, que existe un claro subregistro de la situación en Chiapas y que incluso pareciera que el número de defunciones tuviera un tope”, opina Saúl Zenteno Bueno, funcionario de la ONU.


Situación de los médicos

“No te puedo hablar de cifras reales porque sinceramente tengo miedo. No nos permiten hablar de eso”, mencionó una fuente médica que pidió el anonimato.


Describe que los altos funcionarios del estado les indican que no deben conceder datos de contagios en entrevistas.


“(La censura) es un problema, porque confirma esta lectura sobre el manejo de la pandemia en cuanto a que existe la necesidad de mantenerse en (semáforo) verde a toda costa, de ejercer censura, opacar información, no ser transparente y eso no abona a la construcción de una democracia ni de políticas públicas”, indica Saúl Zenteno.


De acuerdo con el INEGI, 71.8% de los trabajadores en Chiapas se encuentra en la categoría de tasa de informalidad laboral (por lo que no cuentan con seguridad social). La población defiende que necesita salir a trabajar, además de que uno de cada tres chiapanecos (29.7%) se encuentra en calidad de pobreza extrema (Coneval, 2018).


Información: Héctor Molina, Fredy Figueroa y Maritza Pérez/ El Economista